8.7.25

Crítica de la madurez: Escrito 31: "Rogi"

 Rogi


–Hay una palabra que no podés pronunciar enojado.


–¿Qué? ¿Cuál?


–Que no podés pronunciar esta palabra así –dijo él y frunció el ceño hasta armar casi una sola ceja. Los labios apretados formaban un piquito. En medio de todo eso estaban esos ojos azules, un cielo atrapado en los iris más hermosos.


–Triangulito.


Risas y risas. Creo que teníamos 23 años cuando me contaste ese chiste boludísimo. Todavía estabas en Caballito, por Cucha Cucha. Te visité millones de veces. Todavía sigo pudiendo ir sin tener que recordar la dirección exacta. Mis pies, mis manos y mis ganas de verte saben adónde ir, qué timbre tocar, qué decir cuando uno de tus viejos dijera hola.


–¡Soy Lean!


Así como exclamaba mi nombre también había exclamado el tuyo. Como aquella vez en Jujuy.


Éramos 6 amigos. Un grupo raro, en esa época estábamos unidos, pero era todo de mentira. Quedamos pocos juntos. Nuestro viaje de egresados de secundaria. Todos con 18 o 19 años yendo de mochileros al NOA. Paramos en Maimará como por dos semanas. Dormíamos juntos en la carpa. No sé cómo hacías, pero te armabas tipo capullo, apenas se veían tus rulos amarillos, y con la cara casi contra el aislante te dormías sin moverte ni hacer un ruido. Chabón, rarísimo. No tan raro como tu odio al queso y fiambres y salsa y mayonesa.


Todos teníamos que resolver qué hacer en los últimos días. Algunos tenían plata todavía, otros no mucho, otros preferían descansar. Del grupo de seis personas, vos y yo (siempre fuimos unidísimos e inseparables) decidimos recorrer la zona. Al lado de Maimará está el cerro de los siete colores. Había que ir.


Seguimos una ruta de tierra que nos dejó frente a un río seco seco. Miento. Había agua, pero apenas contaba como río, eran más arroyos fluyendo casi en paralelo por el lecho de un río. Yo ya bailarín y más largo, me animé a saltar. Creo que ambos pudimos pasar por el primer arroyito. Cuando llegó el segundo, a pocos pasos del primero, yo me mandé con un grand jeté. Me embarré las Topper blancas. ¿Justo esas tenía que ponerme ese día? Vos decidiste que no ibas a llegar. Con tu 1.65m no podrías llegar. Decidiste no puedo, Lean, vos seguí y yo doy la vuelta, decidiste. Y yo seguí cruzando. Nos vemos allá adelante.


Terminé de cruzar. Habrán sido unos... 10 minutos. ¡Roger! ¡Rooogeeeeer! Nada, che. Tenía una sensación mezclada entre la seguridad de que ibas a estar bien y te iba a encontrar y el pavor de que quizá nos estábamos perdiendo, de que quizá nos estábamos separando más. Pero vos siempre vas a estar acá.


¡Roger!


Me crucé con un caballo. Salvaje tal vez, no me animé a acercarme. Qué sé yo que te puede hacer un caballo. Me desvié para la izquierda. Ahí sí sufrieron las Topper. De repente me vi hundido a la altura de las pantorrillas. Las rodillas. Arenas movedizas. No, no. Barro. Más barro que antes. Pero me hundía, ese pantano me tragaba y vos no estabas, Roger...


Escena desaparecida. Desaparecida, fin. Ni idea cómo llegaste. Se me borró esa parte. Pero ahí estabas. Tengo un recuerdo vago de vos saliendo de un arbusto bajito, ileso. 18 años, el niño del grupo. Yo era el más grande. No creo que nos hayamos dado un abrazo. Eras muy reacio al contacto. Una vez me invitaste a San Bernardo con tu familia, ahí aprendí hebreo con Diana. ¿Nunca me vas a dar un abrazo, gil? Soy tu mejor amigo. Y en la escalera me diste el abrazo más sincero e hinchado las bolas del mundo. Ese sí me acuerdo. Casi que no es un recuerdo, es algo trascendental, transversal a todos los tiempos, plasmado en el éter de la existencia. Esa vez nos abrazamos, pero después de casi ahogarme y ser masticado por un caballo, no.


Si hay relieve, hay que subir. Encontramos una lápida en la punta de uno de los cerros. O un santuario. Creo que había una virgen.  Nos pareció tenebroso, pero no era para tanto. Éramos dos niños pensando en historias de terror. Ambos fanáticos. No pudimos escalar todo, era bocha. Pero hicimos bastante altura. Silbaron en un momento. Silbaste. Le respondiste. ¿Qué sos boludo? ¿Cómo vas a responder un silbido en el norte de Argentina, en medio de la montaña, estando solitos los dos. El Pomberito, Rogi. Nos fuimos rápido. Ya miraba para todos lados. No creo en mitos del campo, pero le creo a mi abuela. Así que nos vamos, gil.


Ya para esa época eras mi mejor amigo. Increíble que no haya cambiado. Cuanto mucho, aumentó el amor. Te admiraba, sabés. Creo que ahora te admiro más, porque estudio lo que vos elegiste como carrera. Y te fuiste. Y la amistad no cambió. Y te casaste. Y la amistad no cambió. Muy loco amar tanto. Muy loco elegir y reelegir. Todo el tiempo, todos los días. Y volviste. Y la amistad no cambió. Bueno, se entiende.


Me cagaste a pedos por no haber sido tan comunicativo. Fuiste, sos y serás la única persona que podía llamarme y con la que podía hablar horas. Con o sin dolor, con o sin eventos importantes para contar. Solo nuestras voces y encontrarnos. Y todavía nada cambió.


Ahora estamos de nuevo en ese río. Nos imagino ahí en el río más ancho e insaltable. No te animaste y te fuiste a buscar otro camino. Seguís en ese camino. No te veo, pero andás por ahí. Hermoso elfo del tamaño de un hobbit; gran DM cuya historia nunca podré jugar. Con esa misma sensación de seguridad y miedo, yo sigo adelante. Y cada paso pesado carga con toda la espera y esperanza. Esperando que aparezcas en breve, por alguna esquina, por algún arbusto y grites mi nombre.


23.5.22

Crítica de la madurez: Escrito 30: Las milas en lo de la abu.

 Necesito morir

Esa es mi respuesta, es la solución

Debería hacerlo donde me encuentren, pero no deban limpiar

En algún bosque al que sepan que fui

Para que no esté preguntándose si estoy en Bélgica o Nueva Zelanda

Para que tengan un duelo inmediato

"Lean se murió, listo"

Y unas milas en lo de la abu


Ya me cansa pensar todo el tiempo en todo lo que se puede pensar

Porque si algo es pensable (y todo lo es), mi cuerpo lo procesa

Y no sé cuánta RAM me quede disponible para algunos procesos,

Ya el hardware se está rompiendo, la garantía expiró

Las partes se caen y no funcionan igual

Y como nunca frena la cuestión, sigo de largo

Solo, inmerso en mil hipótesis, en general todas malas


Ecce ego, ecce nemo

Tengo sueño

Ni este escrito me dan ganas de termin

Crítica de la madurez: Escrito 29: Miedos.

Temo que se vaya Mu

Tengo miedo de quedarme solo

Me da pavor mirar hacia arriba estando en un 10 piso

Siempre presiento que algo malo va a pasar

Le temo al futuro

Le huyo al pasado

Me da ansiedad el presente

Lo hipotético me ocupa la memoria a corto y largo plazo

Y Mu sigue mal

Y mi cuerpo me responde distinto

Y me duele el costado, me duele el ciático

Me duele la mandíbula, me duele el hombro

Y Mu sigue mal


Tengo miedo de tirarme al agua y que esté fría

Temo mirar hacia atrás y querer volver

Me aterra que lo que acabo de decir no es lo que quería decir

ME preocupa no poder editar mi palabra oral

Odio que no haya Control Z en la vida real

Necesito que se quede Mu

Tengo miedo de que se vaya

Tengo miedo bocha

Mucho miedo

No me deja dormir pensar que le duele

Y mientras me preocupo

Mu sigue igual


Le temo a la tristeza porque me lleva para abajo

Le huyo a la autorreflexión porque me lleva para abajo

Pero me gusta la música que me lleva para abajo

Porque me gusta estar abajo

Porque estoy cómo acá abajo


Me jode que lo que veo no me complace

Me siento un forro si tengo que ser sincero y decir que no

Porque aunque entienda que es mejor ser sincero y hacer lo que quiero

Nunca quiero joder ni lastimar a nadie

Pero lo hago

Y no puedo con todo, algo tendré que ceder

Te cedo a vos o a mí?


Tengo miedo de no poder soltar

Tengo miedo de soltar y que no vuelva

Tengo miedo de soltar y que vuelva

Tengo miedo de que no exista, que no haya nada

Tengo miedo de que no existas, que ya no seas nada

Tengo miedo de que no existan, y yo no sea nada


Odio y temo y aborrezco y me da tristeza tener miedo

Odio y temo admitir que tengo miedo

Porque si lo digo, lo hago más real

Si lo digo, el nudo en la garganta existe, lo activé

Hasta recién podía frenar el llanto

Porque si mirás hacia arriba y pensás en tus siguientes actividades del día

Podés sentir cómo las lágrimas se sujetan del borde de tus párpados

Y acumulan sin rebalsar

Y con una rápida absorción de las mangas del buzo, chau lágrimas

Pero ahora que lo dije, es cataratas

No llegaron todavía, porque escribo

Pero dame unos minutos que se viene

Dale a este texto una frase más y se larga

Dejame que diga que Mu sigue mal...


No me da miedo morirme

Cada vez es menor el temor, me podría morir ahora y estaría bien por mí

Ya abracé a Mu, ya di clases, ya bailé en escenarios,

Ya besé a quien quise, ya comí esos flanes mixtos,

Ya me cagué de risa con mis amigos, ya compartí una comida con mi familia

Ya está

Me puedo ir tranquilo

Me quiero ir tranquilo

O al menos no me jode irme

Pero, al mismo tiempo, me da miedo que no me de miedo morir

Porque quizá me acerque más a la muerte

De eso hablo constantemente, de la muerte

De no tenerle miedo

Le temo más a lo que suceda con uds si me muero

Pero si muero no podré preocuparme

Ni tener miedo

Ni extrañar a Mu o a la tía

Si me pierdo por ahí, yo ni enterado

Así que chau.

24.7.19

Crítica de la madurez: Escrito 28: Yo también.

Nunca me lo dijiste, pero sé que es así.
Ahora me toca llorar a mí.
Y creo que yo también, pero no me puedo hacer cargo
Lloro por eso y porque vos te hiciste cargo.
Solo que fue de una manera dolorosa.
Gracias y perdón.

Andate. Andá tranqui.
Pero no te vayas.
No te voy a joder.
Pero quedate cerca.
Conoceme todo lo que quieras.
Yo te quiero conocer.

Yo te quiero.
Te quiero mucho.
Muchísimo.
Demasiado.
Ahora sé que es demasiado.
Yo también.

11.4.19

Crítica de la madurez: Escrito 27: Valgo?

Quién si no?
Necesito que me quieras
Necesito que me busques
Necesito que me necesites
Necesito que no me necesites
Necesito que no me busques
Necesito que no me quieras
Necesito atención
Mesurada, pero constante
Quién si no?
Para qué estoy si no?

Necesito no necesitarte
Ni quererte, ni buscarte
Pero te busco
Porque te quiero y te necesito
Pero no te quiero ni te necesito
Te busco porque hay un slot que debo rellenar
Un espacio que debo utilizar
Si no, se cae el sistema
Si no, revienta todo

El loop es necesario, es obligatorio

Être heureux
Être heureux
J'n'sais pas si c'est ça que je veux trouver
J'n'suis pas ça
Todo el mundo está asustado ahí afuera
You attach and detach
That's life

3
I can matter a lot to you
You might not wanna live without me being around
But what if I don't matter to myself
Is there a coming back from not caring too much?
I don't really like me
I dont like the way I feel things
I overfeel or don't feel enough
Sleep

I do
I enjoy my scars
I like my scars
Never deep, never smooth
Just to feel something new
I need my scars
I collect scars
I lick scars
I seek for'em


Valgo?
[...] Siento que los estoy salvando [...]

27.7.18

Crítica de la madurez: Escrito 26: Unsafe.

I don't feel safe.
I don't feel enough.

Tengo que hacer que los demás me quieran
porque si no, nadie me querría.
Porque yo no me quiero.

Gracias por quererme.
Algún día aprenderé.

I don't know how to run from it.
I don't know if I should.
I don't know shit.
I barely am.
- barely.
--.
-.
.

26.6.18

Crítica de la madurez: Escrito 25: En otros.


Somos en otros,

por otros estamos.

Quiero tu aprobación

porque con ella me autorrealizo,

pero ya no es "auto", es por vos;

a partir de eso soy.

Y soy por vos.

Soy a partir de vos.

Sin vos no existo.


Los otros no siempre son los otros que quiero

porque puedo ser lo que otros detestan.

Y entonces, soy algo detestable.

Y si detesto, no quiero ser.

Pero no puedo evitar ser

porque el otro ya me piensa así.

Soy por los otros que me detestan.


Me quieren mucho a veces.

¿Por qué?

Me aprueban y me gusta.

Me miran y me quieren.

Y si me quieren, me gusta.

Pero no me gusta que me guste.

Así soy, porque el otro me quiere.

Pienso que me quiero a partir del otro.

Soy por los que me quieren.


A veces me gusto

porque los demás me quieren

(y me detestan).

Soy por eso,

porque me ven así.

Si tengo cosas detestables y puedo ser querible igual,

no soy algo fácil.

Soy la relatividad de los ojos de los otros,

soy todo eso,

soy por todos ustedes.


Pero no sé quién soy.

O soy muchos y no lo entiendo.

Quiero ser por ustedes.

Pero no sé si puedo ser sin mí.

No sé si puedo ser si yo no soy mi propio otro.

No sé si soy.